El gran Gatsby, de F.S. Fitzgerald.

¡Hola! Cuando abramos las páginas del libro que Goyo y yo guardamos en nuestro compartimiento secreto de iones literarios nos vamos a encontrar con los años locos del jazz, nos encontraremos, también, con la belleza física con el ‘Art Decó’, el placer el brillo de los Estados Unidos de los años veinte, y el amor, ¡ah, el amor!… Ahora bien, si nos atrevemos a entrar en los cuartos más íntimos de las mansiones por las que transcurre esta historia, descubriremos que ese el amor está arropado con uno de sus abrigos más pesados y peligrosos: ¡la obsesión!; y vamos a descubrir, también, la frivolidad, el arribismo y la inquietante presencia de la muerte Este libro es, pues, un lúcido referente del fallido ‘sueño americano’

Les presentamos a nuestro invitado: El gran Gatsby, de Francis Scott Fitzgerald Bienvenidos a El Ojo Nuclear, un espacio para lectores biónicos La literatura del siglo XX se enriqueció para siempre con Jay Gatsby, el personaje alrededor del cual gira esta novela mítica; Jay Gatsby, el hombre que mientras más acumulaba más perdía, la figura que encarna la profunda pobreza de ciertos millonarios, el más romántico de los fríos, el más solo de los rodeados; nadie se atrevía a indagar mucho de dónde venía su dinero, pero pocos se resistían a recoger las migas de oro y placer que caían de su mesa ¿Por qué y para qué surgió ese Jay Gatsby, el de la riqueza deslumbrante, el recién aparecido que se abrió paso, sin escrúpulos, en una sociedad a la que nunca perteneció? ¿Qué quería buscar con ese misterio impostado de hombre atractivo, generoso, lleno de poder e inalcanzable? En las pocas páginas, porque no es una novela muy larga, de Francis Scott Fitzgerald asistimos a esas revelaciones conmovedoras que convierten este libro en una fábula sobre la sociedad contemporánea Les ha hablado de Jay Gatsby pero a él no lo vamos a conocer directamente; no, nos acercaremos a él a través de los ojos de otro personaje de la novela: Nick Carraway, el verdadero narrador de la historia

Nick es un joven de clase media nacido en el medio oeste, ex combatiente de la Primera Mundial y recién graduado de la universidad de Yale, donde tuvo contacto con esa clase alta y cerrada del Este de los Estados Unidos Carraway, el personaje, alquila una casita en la costa de Long Island, casualmente al lado de la mansión de un tal Jay Gatsby, un excéntrico que ofrece lujosas fiestas, pero nunca participa en ellas Ni se deja ver El asunto es que este muchacho del que les hablo, Nick, está deslumbrado por toda esa fortuna que no puede alcanzar, pero que ha visto muy cerca; es más, él mismo tiene una prima, Daisy, casada con el rico heredero de una fortuna antigua Un día Nick recibe la tan codiciada invitación del rico Gatsby a una de sus fiestas y pronto descubrirá que el millonario, más joven de lo que se hubiera nunca imaginado, se deja conocer por él y le permite cierta confianza ¿por qué? ¿La amistad de Gatsby será desinteresada? Ahí les dejo el cuento para que tengan ustedes mismos el placer de descubrir lo que sigue

Esta obra, a la que la junta editorial de Modern Library consideró la mejor novela estadounidense del siglo XX y la segunda, después de Ulises, en habla inglesa, ha inspirado películas, obras de teatro, ballets y hasta juegos de computadora, ¡Así como suena! fue recibida con frialdad cuando fue publicada por primera vez en 1925 Las críticas de los especialistas fueron buenas, pero el gran público, al parecer, no estaba preparado para ella Fitzgerald, su autor, murió muy joven, a los 44 años, en medio de la depresión, la angustia por la enfermedad mental de su mujer, el alcoholismo y una terrible sensación debe su obra había sido mediocre Él murió en 1940 y hoy se lo mira como el gran epítome de la llamada Generación Perdida, un grupo de genios-escritores que vivieron entre la Primera Guerra Mundial y la Gran Depresión, y entre los cuales están nombrecitos de la talla de Ernest Hemingway, John Steinbeck, John Dos Passos o Erskine Caldwell Sólo hasta bien entrados los años 50 la obra de Fitzgerald recibió el reconocimiento que se hubiera merecido en vida

Escribió cinco novelas largas largas -El gran Gatsby es la tercera- ensayos y varios cuentos y novelas corta De hecho, yo creo yo creo que aquí en mi compartimiento secreto de iones literarios debo tener

¡ah, sí, aquí está! ¡Lo encontré! Aquí hay un compendio se los recomiendo, son muy buenas La verdad es que muchos críticos han visto en el protagonista de la novela, Nick Carraway, un alter ego de Fiztgerald Los dos, el personaje y el autor, se dejaron deslumbrar con el dinero y el brillo de la costa este de los Estados Unidos en esos locos años 20, , – ¡No me digan que ese pelo no le daba un aire poderoso! – Bueno, los dos, personaje y autor, empezaron su vida con el impulso de los sueños y terminaron en el abismo, empujados por esos mismos sueños Los dos, personaje y autor, son la evidencia de una ingenuidad perdida, de la ilusión de las entreguerras, cuando la juventud quería cobrarle al mundo la sola proeza de estar vivos y al recibir la cuenta de cobro se dieron cuenta de que ya no tenían cómo pagar, que los dioses había sido asesinados, y que las guerras ya estaban anunciadas A veces me pregunto si nuestra Latinoamérica está lejos de la frivolidad con la que esta novela describe una época pasada en los Estados Unidos; si, a pesar de todo, personajes extravagantes siguen comprando su puesto en una sociedad que no se cuestiona por el origen de su dinero, si el oro aún se usa para comprar una distancia social y marcarla mejor, si las construcciones mentales que hacemos de nuestra sociedad no terminan como las burbujas de jabón, agujereadas por la mafia y la corrupción política generalizada

Y en cuanto a nosotros, hablo de nosotros los lectores, me pregunto si no hemos creído alguna vez que nuestros sueños, así provengan de una fuente tan digna como el amor, justifican cualquier aventura que emprendamos y pasemos por encima de los más vulnerables como queda dramáticamente expresado en el final de esta novela Gracias por suscribirse a El Ojo Nuclear Activen la campanita para contarles de nuevos videos